miércoles, 14 de diciembre de 2011

Llevo tiempo dedicándome al estudio de las ciencias, y descubrí que lo mejor es con música, ya que la mente se dispone a crear más fácilmente cuando está estimulada. Una de las canciones que escucho para esto la dejo en registro acá. Es de Gabriel Alcayaga, se llama Errar. A disfrutar !!



miércoles, 7 de diciembre de 2011

En estos días, ...

Realmente no sé qué escribir. Podría contar alguna anécdota, algo acerca de mi diario vivir, una que otra vanalidad para alisar el día. Pero la verdad es que no quiero perder costumbre de teclear un rato, sólo por hacerlo. No es que escribir aquí haya cambiado mi vida, pero me ha ayudado a ordenar un poco aquello que no se puede estructurar por sí mismo.

No he explorado mucho este pequeño mundo, pero ya no me importa si el uso que le doy al blog es el "normal", así será como funcione el mío, porque así se me permite hacer.

Pero intentaré algo nuevo (cuando me dé el ánimo y el tiempo suficiente), como subir música, o algún cortometraje, lo que sea, para compartir, y que de alguna forma, en unos años, pueda recordar cómo era en estos días, y ver mi evolución o involución.

Y de pronto, este blog tiene una nueva finalidad. Excelente.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Desaparecer, ...

En estos momentos tengo ese irrefrenable impulso de desaparecer, de buscar lo que el horizonte esconde. No es por sentirme especial, ni transformar la emancipación en autorreferencia, pero siento que no encajo en este lugar. Desearía poder llamar a algún sitio "hogar", y que esa palabra brote del alma, no solo de la costumbre.

Seguramente tengo una baja autoestima. Siento que no tengo a nadie, en ningún lugar, y que podría desaparecer hoy, y no tener un cargo de conciencia real por el sufrimiento que pudiese ocasionar mi partida, que sería poco o nulo. Similar a una picazón en el brazo, fácil de rascar y de olvidar.

Puede que sólo sean las presiones de este puto mundo, pero mi imaginación suele recurrir a esto, a la partida libre y sin rumbo, en un viaje de descubrimiento personal, de saciar mi espíritu de aquello que no se puede explicar, y que sólo se siente, y se siente. Encontrando tesoros en cada persona, y apreciarlos para mi enriquecimiento.

Otra vez, el espécimen que alguna vez lea esto, le tocará recorrer la conciencia de un hombre al cual el mundo lo perturba, lo inquieta, lo remueve, ..., que quiere escapar de él, y quiere conocerlo como un todo.